viernes, 11 de enero de 2013

LA ALIANZA UPA-COAG RECLAMA A LAS ADMINISTRACIONES QUE NO SE AUTORICE EL EMPLEO DEL FRACKING EN LA EXTRACCIÓN DE GAS




Valladolid, 11 de enero de 2013

La ALIANZA POR LA UNIDAD DEL CAMPO alerta sobre la falta de información y transparencia en la composición y mezcla de distintos productos químicos que se utilizan en la inyección de fluido a elevada presión mediante la Fractura Hidráulica.
LA ALIANZA POR LA UNIDAD DEL CAMPO se muestra radicalmente en contra de los posible riesgos que comporta para la población rural, acuíferos, suelos y aire, y por lo tanto para actividades como la agricultura y ganadería. 

La ALIANZA UPA-COAG reclama a las administraciones que no autoricen en nuestra comunidad autónoma el empleo de la técnica del fracking o fractura hidráulica para la extracción de gas.
Nos posicionamos radicalmente en contra por el uso consistente en una técnica agresiva en el subsuelo para la ruptura de rocas y piedras a través de una  inyección de  fluido a elevada presión que supuestamente contiene agua, arena y productos químicos. Este fluido tiene una fase de retorno que en parte emerge a la superficie junto al gas permaneciendo en el subsuelo desde donde podría migrar hacia la superficie o hacia los acuíferos.
UPA-COAG considera que no hay suficiente información y transparencia sobre las repercusiones que puede tener la mezcla de estos componentes químicos, por lo que ante el más mínimo riesgo que comporta para la población, el medio ambiente, y por lo tanto para actividades como la agricultura y ganadería no puede permitirse su uso. 
Los agricultores y ganaderos de las zonas en las que se están tramitando las solicitudes de los permisos de investigación se encuentran en una situación de indefensión debido a la falta de transparencia que rodea estas concesiones, y  al oscurantismo y poca disposición de las administraciones para informar sobre los sondeos con profundidades de entre 3.000 y 5.000 metros que se realizan, y por la composición exacta de la mezcla de agua y sustancias químicas (ácidos, bioácidos, bactericidas, inhibidores de la corrosión, reductores de fricción, fluidificantes, etc.) que se inyecta en la roca para fracturarla y liberar el gas que teóricamente se encuentra atrapado.
La aplicación del principio de prudencia que parece imperar en otros países de nuestro entorno es lo que desde UPA y COAG reclamamos a la Junta de Castilla y León y que, en consecuencia, rechace las autorizaciones a las empresas que pretendan utilizar esta peligrosa técnica en nuestra comunidad autónoma.
Desde la ALIANZA POR LA UNIDAD DEL CAMPO UPA-COAG hemos denunciado este modo de extracción de gas que pone en peligro la calidad de los recursos naturales de nuestra región.
Por este motivo estamos participando activamente en los actos y el movimiento antifracking que se están produciendo en nuestra región. El último acto, en forma de manifestación y tractorada  convocada por  la ALIANZA UPA-COAG, se produjo en Villarcayo (Burgos) el pasado mes de diciembre, donde hubo una participación masiva de la sociedad, que refleja la preocupación generalizada por esta técnica de extracción de gas.

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